Las reservas de agua serán uno de los recursos naturales más afectados por el impacto del cambio climático

Según expertos de la ONU, el mundo no es consciente de las graves consecuencias que supone el cambio climático para el agua. Es necesario que reforcemos nuestra protección de los recursos hídricos para evitar futuros conflictos.

La desertificación, las inundaciones, el deshielo de los glaciares, las sequías, los ciclones o las enfermedades debidas a la contaminación del agua tales como el cólera, forman parte del impacto del cambio climático. Según Zafar Adeel, presidente del grupo “ONU-AGUA” y encargado de la coordinación de los trabajos relacionados con el agua que realizan 26 agencias de las Naciones Unidas, “Las principales manifestaciones del aumento de las temperaturas afectan al agua. Esto supondrá un impacto en todos las instancias de nuestra vida social, en los sistemas naturales y en el medioambiente”.

Estos cambios radicales podrían amenazar la agricultura o los recursos de agua dulce desde África hasta el Medio Oriente. “ Es en esa zona geográfica donde residen los potenciales conflictos añade Zafar Adeel. La escasez de agua tal y como tuvo lugar en Darfur, Sudán, es un factor generador de conflictos.

Sin embargo, Zafar Adeel declaró que el agua podía ser un objeto de cooperación y colaboración, tal y como se ha demostrado en diversas ocasiones, como por ejemplo cuando India y Pakistán trabajaron conjuntamente para gestionar el río Indus a pesar de los conflictos fronterizos entre los dos países. Lo mismo ocurrió con Vietnam, Tailandia, Laos y Camboya, países que colaboraron en la elaboración de la Comisión sobre el rio Mekong.

“El agua constituye un buen motivo para cooperar, ya que puede gestionarse como una cuestión absolutamente apolítica”, declaró Zafar Adeel, que también es director del “Instituto para el Agua, el Medioambiente y la Salud” de la Universidad de las Naciones Unidas, con sede en Canadá.

Las regiones susceptibles de sufrir sequías a causa del cambio climático están comprendidas entre Asia central y África del norte. Hasta 2020, aproximadamente unos 250 millones de personas podrían sufrir las consecuencias de una escasez de agua en África, según afirma un grupo de expertos medioambientales de las Naciones Unidas.

Según Zafar Adeel, el agua debería ocupar un lugar importante en los debates sobre seguridad alimentaria, paz, cambio climático y el restablecimiento de la salud económica mundial. “El agua es una cuestión primordial en cada uno de estos asuntos, pero no es considerada como tal.”

Los esfuerzos para luchar contra el cambio climático ejercerán aún una mayor presión sobre el agua debido a las necesidades económicas relacionadas con el riego, los agrocombustibles y la energía hidroeléctrica.

Zafar Adeel también avanzó los esfuerzos necesarios para gestionar los recursos hidrios enumerando la cantidad de agua necesaria para la elaboración o la producción de diferentes productos, desde la carne hasta el café. Un estudio demostraba que para producir unos pantalones vaqueros se necesitaban 15.000 litros de agua. La concienciación por parte de la industria de la cantidad de agua que utiliza es algo muy necesario para su conservación.

Zafar Adeel añadió que el mundo debería aspirar a reducir a la mitad la cantidad de personas que no tienen acceso al agua potable hasta 2015, aunque seguramente no conseguirá el objetivo de mejorar las condiciones sanitarias de las 2.800 millones de personas que carecen de acceso a los servicios sanitarios más básicos.

Fuente: www.ladyverd.com