Barcelona no es lo suficientemente eficaz desde el punto de vista energético

El consumo de energía en los hogares, los comercios y la industria de Barcelona sigue creciendo por encima de los objetivos de sostenibilidad, y sólo en el área del transporte se mantienen las metas fijadas, aunque sea este sector el más contaminante, al producir el 44% de los gases de efecto invernadero.

Según los datos de ‘El contador’ de la Agencia de Energía de Barcelona, que ha presentado hoy la tercera teniente de alcalde, Imma Mayol, el incremento medio anual del consumo en el periodo 1999-2004, fue en el conjunto de los sectores de un 3,22%, pero con diferencias considerables entre unos y otros, ya que en el ámbito doméstico creció un 4,49%; un 4,81%, en el comercio; un 3,41%, en la industria, y tan sólo un 0,83% en el transporte.

El dinamismo económico de la ciudad en los últimos seis años ha disparado el gasto energético medio anual, con unos porcentajes de consumo que, no obstante, duplican el ritmo de crecimiento de la economía, lo que demuestra que la capital catalana no es lo suficientemente eficaz desde el punto de vista energético, y que en el periodo controlado, ha aumentado la energía que se requiere para ‘producir un euro’.

Mayol ha reconocido que los datos no son halagüeños, si se compara con la media europea, sobre todo en consumo y emisiones de gases con efecto invernadero, aunque sí dan un respiro en cuanto a la producción de energía sostenible en la capital catalana, ya que en 2004 se incrementó en un 75,5% la energía eléctrica generada por fuentes renovables (solar térmica y solar fotovoltaica y biogás).

El asesor del Observatorio de Sostenibilidad de España, Domingo Jiménez Beltrán, que ha asistido al acto ha alabado la valentía del Ayuntamiento de Barcelona de contar con un ‘contador’ que controle el consumo de energía, sus fuentes, y la emisión de gases.

Jiménez Beltrán ha señalado que el actual sistema energético es insostenible e ineficaz, y ha alertado de los efectos que el cambio climático tendrá en Europa, con una ‘mediterraneización’ del norte del continente y una ‘aridización’ de los países del sur.

Fuente: Terra Actualidad
Agencia: EFE