Un iceberg tan grande como Menorca pone en peligro las rutas de navegación

Un enorme iceberg de unos 720 km cuadrados, más grande que la isla de Menorca, se mueve a la deriva por el Océano Antártico, lo que podría, si sigue avanzando, poner en peligro la navegación. La mole helada se desprendió el pasado julio del glaciar de Pine Island, el más largo y rápido en la Antártida y el que parece derretirse a más velocidad.

Los científicos esperaban este nuevo desprendimiento del glaciar desde octubre de 2011, cuando una expedición de la NASA observó por primera vez una espectacular grieta en su superficie, según informa la BBC. Romperse por completo le llevó dos años. El pasado julio, los investigadores se dieron cuenta de que el gran fragmento de hielo ya se había desprendido. En la actualidad, el bloque flota a pocos kilómetros del glaciar y se separa cada vez más.


Investigadores británicos de la Universidad de Sheffield y la de Southampton seguirán el iceberg durante seis meses para conocer su estado y poder predecir su camino a través del océano para evitar que los barcos que atraviesan las rutas marítimas de la zona se encuentren en peligro.

«El movimiento actual no plantea problemas ambientales. Sin embargo, un iceberg gigante anterior a este finalmente entró en el Atlántico Sur y si esto ocurre podría representar una amenaza para los barcos», explica Grant Bigg, investigador de Sheffield.

«Si el iceberg se mantiene alrededor de la costa de la Antártida, se derretirá lentamente y añadirá una gran cantidad de agua dulce que se queda en la corriente costera, alterando la densidad y afectando a la velocidad de la corriente. Del mismo modo, si se mueve hacia el norte se derretirá más rápido, pero podría alterar la corriente creando un tope de agua dulce por encima del agua de mar más densa».

Bigg cree que el iceberg no es lo suficientemente grande como para tener un gran impacto, pero podría dejarse notar. «Si estos hechos se vuelven más comunes , habrá una acumulación de agua dulce, lo que podría tener efectos a largo plazo», agrega .

Icebergs gigantescos se separan del final de la plataforma de hielo cada 6 o 10 años. Anteriores acontecimientos de este tipo ocurrieron en 2007 y 2001. Los investigadores creen que es un proceso natural y no lo vinculan directamente a los cambios climáticos que sí afectan a la capa de hielo de la Antártida Occidental. Las mediciones aéreas y de los satélites han registrado un marcado adelgazamiento y un aumento en la velocidad del glaciar en las últimas décadas.

«El de Pine Island es el glaciar que se reduce más rápidamente en el planeta», explica a la BBC David Vaughan, del British Antarctic Survey. «Ha perdido más hielo que cualquier otro glaciar y está contribuyendo al aumento del nivel del mar más rápido que ninguno. Eso hace que sea digno de estudio».

Noticia leída en www.abc.es